En Clínica dental Moyúa nos gusta pensar en la boca como en la maquinaria de un reloj. Cualquier fallo hará que su funcionamiento no sea preciso. Nuestra boca tiene una función principal: masticar y triturar los alimentos que comemos. Sin embargo, tanto si tenemos defectos en varios dientes como si las irregularidades de posición afectan a toda una arcada, sufrirá todo el conjunto. Como si de un dominó se tratase, una pieza mal colocada puede hacer caer al resto.
Sabemos que tomar la decisión de seguir un tratamiento de ortodoncia, aunque sea necesario, no es tarea fácil. Así como la estética suele ser uno de los resortes por los que una persona se plantea acudir a la clínica y pedir ayuda, la duración y el coste suelen ser algunos de los condicionantes que más retrasan la adopción de medidas correctoras en los dientes. Al final, nuestros pacientes se acaban dando cuenta de que una ortodoncia supone mucho más que conseguir una sonrisa bonita y, sobre todo, que la duración y el coste son proporcionales a los beneficios que obtienen.
¿Aún no tienes claro cuáles son los beneficios principales tras hacerte una ortodoncia? Aquí te explicamos los 10 más importantes:
Menos desgaste en los dientes. Cuando los dientes están alineados, su choque entre ellos es, por decirlo de una manera sencilla, natural. Sin embargo, cuando están apiñados o torcidos no hay una armonía en la mordida. Esto hace que se produzcan desgastes en estas piezas dentales lo que las acabará haciendo más débiles y propensas a más enfermedades bucales. La ortodoncia corregirá los defectos y las irregularidades de posición en esos dientes.
Menos riesgo de caries dental. Es muy común que las personas con dientes apiñados tengan más problemas de caries. La razón es sencilla: no es fácil limpiarse los dientes cuando éstos tienen recovecos y huecos antinaturales donde pueden acumularse restos de comida. Simplemente, ni los cepillos de dientes ni la seda dental están diseñados para esto.
Menos riesgo de enfermedad periodontal. Unido a la mayor predisposición a sufrir caries, los pacientes con oclusión dental defectuosa también pueden tener más riesgo de contraer enfermedades periodontales como gingivitis o periodontitis por acumulación de placa dental en lugares de difícil acceso.
Menos movilidad dentaria y sensibilidad dental. Es otra de las consecuencias si los dientes no están en su sitio. Lógicamente, se debilitan y comienzan a moverse. Con un tratamiento de ortodoncia también es posible acabar con casos de sensibilidad dental. Recuerda que la sensibilidad dental se produce porque existen estímulos que entran en contacto directamente con la dentina que está comunicada con la pulpa dentaria. La pulpa tiene terminaciones nerviosas y, de ahí, esa desagradable sensación de dolor cuando tomamos algo frío, caliente, dulce o ácido. Por ejemplo, cuando un diente está montado sobre otro, es muy fácil que parte de ese diente no esté bien cubierto por encía y, por tanto, haga aparición esa sensibilidad dental.
Menos bruxismo. Es cierto que el hecho de rechinar los dientes está asociado a problemas de estrés, pero también lo es que parte del problema puede estar en una mala oclusión, es decir, los dientes de arriba y abajo no encajan correctamente. Una ortodoncia puede solucionar o mejorar mucho una afección como el bruxismo, afortunadamente, cada vez más diagnosticado y tratado.
Menos dolores de espalda, cabeza y oídos. Hay muchos pacientes que se sorprenden cuando se dan cuenta de que corregidos sus dientes, tienen muchos menos dolores de espalda, oídos y cabeza. Piensa que si hoy hay armonía en tu mordida estarás tensionando toda la zona cuando comes y no olvides que los músculos de cabeza, oídos y cervicales están muy relacionados. Hay incluso problemas posturales en menores que están relacionados con la falta de un buen tratamiento de ortodoncia.
Mejor limpieza. Entre los aspectos más positivos de la ortodoncia es que los pacientes, por fin, pueden limpiarse los dientes a conciencia y en profundidad.
Mejor masticación. Este es un beneficio no solo para tu boca, sino para tu cuerpo y tu salud general. Cuando una persona no mastica bien y no puede triturar la comida en condiciones, las digestiones se vuelven más pesadas lo que acaba pasando factura a todo el sistema digestivo. Te lo contamos para que te des cuenta de que tu boca no está aislada, lo que haces con ella tienen efectos positivos y negativos en el conjunto de tu organismo.
Mejor autoestima. La ortodoncia no solo corrige los dientes, sino que también transforma el rostro y hasta hay casos en los que cambia el carácter. No es raro que personas que parecen tímidas, hurañas y sin ganas de relacionarse, en el fondo arrastren un problema en sus dientes.
Mejor estética. Como te decíamos al principio, es una de las principales razones –aunque muchas veces no es la más importante- para acercarse a una clínica dental. La imagen que proyectamos a los demás nos importa y eso no tiene por qué ser malo. Por favor, que nadie te diga que ya estás mayor para hacerte una ortodoncia. Con todo lo que te hemos contado, ya puedes responder a quien te lo diga que una ortodoncia te va a dar mucho más que una sonrisa bonita.